El tribunal escucha un resumen de las ‘defensa llama’ un caso completamente diferente ‘.
En la aptitud del viernes para practicar la audiencia para el ex médico del Team Sky y ciclista británico Richard Freeman, Simon Jackson del Consejo Médico General resumió su caso haciendo acusaciones nunca antes escuchadas de que Freeman trabajó con «durmientes» dentro de las organizaciones que habían usado sustancias prohibidas en el pasado. pedir 30 sobres de Testogel, que está prohibido dentro y fuera de la competencia por el Código WADA.
La abogada defensora de Freeman, Mary O’Rourke, que dará su resumen el martes, calificó las acusaciones como «un cambio completo en el caso de GMC», según un informe de The Guardian.
«Hay cosas que el señor Jackson ha dicho esta mañana, ya las 2:30 pm esta tarde, que nunca habíamos escuchado antes. Ha planteado un caso completamente diferente».
Freeman ha admitido 18 de los 22 cargos presentados por GMC y ha admitido haber mentido, pero está impugnando los cuatro cargos relacionados con su intención para el Testogel, que ordenó el 16 de mayo de 2011.
Jackson conectó los puntos entre la «red de engaños» de Freeman en torno a la compra de Testogel y la disputada excusa de que se compró para tratar al ex entrenador en jefe Shane Sutton, llamando a Sutton «el chivo expiatorio» y diciendo «la única conclusión lógica y adecuada» del La primera fase de recopilación de hechos del tribunal «fue que el uso previsto era un uso de dopaje».
En sus conclusiones, Jackson alegó que la presencia de ex drogadictos en las organizaciones apuntaba al dopaje como el uso previsto. «Subrayo que Team Sky y British Cycling no estaban al tanto de esto, pero hubo durmientes, hubo drogadictos en el pasado que estaban dentro de estas organizaciones cuando el Dr. Freeman adquirió el Testogel», dijo Jackson.
«Se habían dopado antes. Por lo tanto, estas no son acusaciones audaces en el sentido de que carecen de fundamento. El GMC ha podido unir todos estos aspectos. Las únicas conclusiones razonables son que no estaban clínicamente indicadas, pero se usaron para dopar un jinete «.
La compra de Testogel tuvo lugar en el segundo año de existencia del Team Sky y en medio de la política antidopaje de ‘tolerancia cero’ del equipo de no contratar ciclistas o personal con antecedentes de dopaje.
Al año siguiente, Lance Armstrong fue sancionado por dopaje y todo el ciclismo profesional se vio obligado a analizar detenidamente su pasado. Michael Barry confesó haberse dopado mientras era compañero de Armstrong y se le impuso una sanción de seis meses después de cooperar con la investigación y se retiró al final de la temporada 2012.
El médico holandés Geert Leinders, que trabajaba con Team Sky, fue objeto de escrutinio al mismo tiempo por su anterior puesto en el equipo de Rabobank y no consiguió una renovación con el equipo, que prometió una ‘investigación completa’ sobre los vínculos.
«El Dr. Freeman miró lo que querían los ciclistas y no se centró en lo que impedía el Código de la Agencia Mundial Antidopaje», dijo Jackson. «Estaba dispuesto a inscribirse con un médico entrante con su magia desconocida y él, en esta y otras ocasiones, cruzó el rubicón ignorando la convención médica para hacer lo que pensó que le proporcionaría una respuesta».
Jackson citó referencias médicas que cuestionan la afirmación de Freeman de que los suplementos de testosterona tratarían la disfunción eréctil y arrojaron dudas sobre las afirmaciones de Freeman de intimidación y mensajes amenazantes que Sutton le envió, diciendo que no había evidencia para respaldar las afirmaciones porque Freeman había borrado los datos de su teléfono. y laptops.
«Solo tenemos la palabra del Dr. Freeman de que destruyó la testosterona en casa», agregó Jackson.
La parte de hechos de la audiencia de Freeman se reanuda el martes, con fases adicionales en marzo y mayo según el caso. Después de comenzar hace casi dos años, se ha retrasado repetidamente debido a la condición de salud mental de Freeman.
El tribunal se está enfrentando al plazo de prescripción de 10 años para cualquier delito antidopaje adicional que pueda surgir de las conclusiones del tribunal.
